EL
MUNDO
25 octubre
2019
Sequedad
vaginal: qué es y cómo tratarla
La sequedad vaginal se produce cuando
los fluídos vaginales disminuyen. En este artículo,
te explicamos cuáles son los síntomas, cómo debes actuar si la sufres y algunos
remedios naturales alternativos que te ayudarán.
La sequedad vaginal es un trastorno muy común entre las
mujeres, que suele asociarse a la menopausia, aunque puede afectar a la mujer
en cualquier momento.
Se produce cuando la cantidad de estrógenos se reduce,
ocasionando la disminución de la lubricación de la zona. Este hecho puede
deberse a diferentes factores: a una infección vaginal, al estrés, a cambios en
la alimentación, etc.
Qué es la sequedad
vaginal
La flora y la mucosa son los dos factores más importantes
que inciden en la salud vaginal. La flora vaginal son microorganismos que
habitan y que protegen la vagina de manera natural. Por su parte, la mucosa de
la vagina produce un lubricante natural, que ayuda a mantener la zona
hidratada. Cuando este equilibrio se rompe, es cuando aparece la sequedad
vaginal, es decir, la disminución del flujo vaginal y la mala hidratación.
La sequedad vaginal puede producir síntomas como irritación,
dolor, ardor, escasez o ausencia de flujo, etc. Estos síntomas pueden ocasionar
un gran malestar a la mujer, sobre todo, a la hora de mantener relaciones
sexuales, y deben consultarse con el ginecólogo.
Por qué aparece la
sequedad vaginal
·
Como ya hemos dicho, el principal factor desencadenante de la
sequedad vaginal es el descenso de estrógenos en el organismo. La principal
causa de este descenso es la menopausia.
·
Pero también puede producirse por la ingesta de anticonceptivos
orales y de determinada medicación hormonal, indicada para el tratamiento de la
endometriosis, cáncer de mama, miomas uterinos, etc.
·
El estrés y algunas infecciones vaginales también pueden causar
este trastorno.
·
El uso de jabones agresivos, algunas lociones, ropa no
transpirable, el perfume de algunos tampones y compresas, el tabaco, etc.
también pueden acentuar este problema.
Cómo se trata y
alivia la sequedad vaginal: tratamientos
·
El tratamiento más común para combatir la sequedad vaginal es la
aplicación de cremas hidratantes específicas. Estas cremas se aplican en el
epitelio o capa vaginal y ayudan a retener el agua de la vagina, manteniendo su
hidratación. Se pueden adquirir en farmacias y no tienen ninguna
contraindicación.
·
Cuando las cremas hidratantes son insuficientes, se puede
recurrir, bajo prescripción del ginecólogo, a tratamientos hormonales locales.
Se trata de aplicar dosis bajas de estrógenos de forma local, directamente en
forma de óvulos o bien mediante cremas que disponen de un aplicador.
·
Sea cual sea el tratamiento elegido, siempre se puede recurrir a
lubricantes para obtener un plus de hidratación durante las relaciones sexuales
y dismunir la fricción.
Remedios naturales
alternativos
Además de los tratamientos anteriormente descritos para
combatir la sequedad vaginal, existen una serie de remedios naturales
alternativos que pueden resultar muy eficaces.
·
Aceite de árbol de té. Este
producto tiene múltiples propiedades antisépticas y ayuda a combatir
infecciones víricas, bacterianas o por hongos. Resulta especialmente útil para
combatir la sequedad vaginal. Para ello, se recomienda hacer baños de asiento
diluyendo unas 10 gotas de aceite de árbol de té en un litro de agua tibia y
permanecer 10 minutos.
·
Manzanilla. Para aliviar la sequedad,
también se pueden realizar baños de asiento con una infusión de manzanilla. La
manzanilla reduce la irritación y la sensación de comezón, gracias a su
capacidad antiinflamatoria.
·
Cúrcuma. Se trata de una raíz con
grandes propiedades antibacterianas y antiinflamatorias, que se utiliza mucho
en la cocina oriental. La cúrcuma también contribuye a potenciar el flujo vaginal.
Para ello, hay que mezclar extracto de cúrcuma con un poco de leche hasta
formar una pasta homogénea. Esta pasta la aplicaremos a la zona íntima con
pequeños toques.
·
Yogur natural. Este alimento, además de
resultar muy beneficioso para el aparato digestivo, si se aplica sobre la piel,
puede ayudar a calmar picores e irritaciones. Para ello, hay que sumergir una
tela de algodón en un poco de yogur natural y aplicarla sobre la zona afectada.
Después, hay que dejar que actúe durante unos minutos y aclarar con agua
abundante.
·
Aloe Vera. Se trata de un potente
hidratante natural, que también se puede aplicar en la zona de la vagina. Para
ello, hay que mezclar gel de aloe vera con un poco de leche, y aplicarla, de
forma externa, sobre la vagina.
·
Aceite de sésamo. Las semillas de sésamo tienen
un gran poder atiinflamatorio, además de poder
utilizarse como un lubricante natural. Tan solo hay que mojar un algodón con
aceite de sésamos y realizar toques en la zona afectada.
Hábitos que te
ayudan a prevenirla
Existen algunas medidas o hábitos que te ayudarán a mantener
alejada la sequedad vaginal.
·
No fumar y evitar el alcohol, ya que ambos disminuyen el nivel de
estrógenos en la sangre.
·
Tener precaución con los medicamentos como los anticonceptivos,
antidepresivos y antihistamínicos, ya que pueden originar sequedad vaginal.
·
Tomar abundante agua, ya que favorece la hidratación y aumenta los
fluidos corporales.
·
Evitar chorros de agua violentos en la zona de la vagina.
·
Evitar el uso del papel higiénico perfumado y cualquier tipo
de aceites o espumas de baño con
fragancia, que puedan irritar la vagina.